Cristina pasó en apenas un segundo de la euforia a la extrema emoción. Fue cuando hablaba José Luis Gioja. En su discurso, el Gobernador recordó a Néstor Kirchner y la Presidenta casi se quiebra. Sus ojos se llenaron de lágrimas y automáticamente miró hacia abajo. La figura del ex presidente estuvo presente en todo momento, sobre todo por parte de las agrupaciones de jóvenes que se dieron cita en Cañada Honda. En varios carteles, los militantes pegaron fotos del ex mandatario. Cuando le tocó hablar, la jefa de Estado se acordó de la visita en la que su fallecido esposo prometió frente a los sanjuaninos ayudar a financiar la construcción del Teatro del Bicentenario, que ayer fue adjudicado a la UTE que tendrá a cargo su ejecución.