Dos australianos quienes el 25 de abril de 2006 quedaron atrapados en una mina de oro de Beaconsfield durante 14 días consideraron que los 33 trabajadores enterrados en Chile “van a salir muy unidos. Van a tener una amistad que va a durar para siempre, pero van a ser personas completamente diferentes”.

Los australianos Todd Russell y Brant Webb, permanecieron encerrados durante 14 días, como consecuencia de un sismo a 914 kilómetros de profundidad, protegidos por una jaula de acero. Luego de cinco días bebiendo el agua que se filtraba de las rocas, empezaron a recibir bebida y alimentos a través de una sonda. Ellos sobrevivieron pero otro minero falleció.

Conocida la noticia de que los mineros chilenos, los australianos hablaron por distintos medios recordando su propia odisea. Russell señaló que el apoyo entre los mineros es fundamental. “Nosotros sobrevivimos gracias a la esperanza, el coraje y a que nos teníamos uno al otro. También tuvimos suerte de tener agua de las napas subterráneas”. También destacó que los chilenos “tienen mucha suerte de tener a 33 personas con ellos para apoyarse”.

El rescate exitoso más reciente ocurrió en China el pasado 5 de abril, cuando 115 mineros fueron rescatados de una mina de carbón, en la que habían quedado atrapados durante tres semanas por una inundación. Para sobrevivir, durante su encierro se alimentaron con cortezas de árbol, aserrín, papel y carbón.