A primera vista, llama la atención el nombre de las marcas de ropa y elementos que se hacen presentes en el tenis de mesa. Y es que son específicas y este es un mercado en el que no se meten algunas multinacionales archi conocidas. Así, aparecen nombres como Donic, Joola, Butterfly o Andro, que incluso ponen sus ojos en algunos jugadores y los auspician. Ahora bien, ¿cómo es el manejo de marketing y sponsoreo de estas marcas, en un ámbito que para los sanjuaninos es prácticamente desconocido?. Por ejemplo, Joola es una empresa alemana y al único jugador argentino al que auspician es a Pablo Tabachnik. A su vez, Donic sponsorea a Gastón Alto y a Diego Temperley, mientras que Butterfly apoya a los jugadores jóvenes y de hecho tiene un programa de desarrollo juvenil. Esta última es, quizá, la marca más conocida en el mundo del tenis de mesa. También está Andro, que es una empresa pequeña y que apoya a varios jugadores menores. Los contratos con los jugadores no se remuneran con dinero, sino con materiales (remeras, pantalones, bolsos, zapatillas, etc.), y también facilitan apoyo en inscripciones de torneos o viajes. Aunque poco conocido en esta parte del mundo, el ambiente del tenis de mesa es un mercado importante en otras partes del país y extremadamente profesional en algunos países de Europa y Oriente.
