Diciembre se adueña del calendario y las Fiestas de Fin de Año atraviesan a todos prácticamente. Tiempo de balances y reflexiones generalizados, este mes también es muy especial para la Casa de la Bondad, en la que se brindan cuidados paliativos integrales a enfermos terminales indigentes sin contención familiar. Y la razón es el repentino aumento de donaciones que recibe este "hospice", siempre durante el último mes de cada año, desde que se creó en 2012, hace 6 años.
La directora, Mirtha Cuadros, reconoció que "evidentemente en diciembre el corazón de muchas personas se abre y realmente las ayudas crecen de manera significativa. Personas, instituciones, algunos de forma anónima. Realmente estamos muy contentos por todo lo que pasó en este mes también".
Empresarios, comerciantes, empleados judiciales, universitarios y municipales y estudiantes secundarios fueron algunos ejemplos de los ámbitos donde se agruparon personas para iniciar una campaña para donar elementos necesarios para el hospice, que se ubica en Paula Albarracín de Sarmiento 777 sur. Los interesados en ayudar se ponían en contacto con las autoridades, preguntaban qué era necesario y así fue que llegaron artículos como secador de ropa, sillas de ruedas, plancha a vapor, insumos y descartables, turbo ventilador, pava eléctrica, mercadería variada y elementos de limpieza. "Otras instituciones y grupos que donaron su tiempo y dones fueron Agrupación Coral Voces del Tulum de Rivadavia, grupo musical del Movimiento Círculos de Juventud y los Payamédicos", añadió Cuadros.
La última donación provino de un grupo de compañeros que trabaja en el Instituto de Energía Eléctrica de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de San Juan. Uno de sus impulsores, Alejandro Maturano, afirmó que "después de conocer cómo se maneja la institución, decidimos hacer algo rápido, antes que terminaran las actividades en la Universidad. Nos pusimos en contacto, nos dijeron los insumos más necesarios y justo se rompió una pava eléctrica y necesitaban un ventilador".
Cuadros afirmó que las donaciones siempre son necesarias para poder realizar las tareas de asistencia a los pacientes y enumeró baño fácil, zaleas descartables, alcohol en gel, crema Hipoglós, guantes de examinación medianos, bolsas de residuos, toallas de papel, jabón líquido para recargar, quitamanchas y guantes de goma naranjas XL y amarillos medianos.
Por supuesto que las donaciones en efectivo también son bienvenidas en el hospice. Y quienes quieran realizar un aporte mensual, para ser debitado, sólo debe acercarse por la sede y llenar el formulario.