San Juan.- Iker Martir Quiroga pesa poco más de 2 kilos, tiene 3 meses y medio y está en casa, con sus papás. Pero el camino hasta su hogar no fue fácil, nació con sólo 26 semanas de gestación y llegó a pesar sólo 425 gr. En medio de la felicidad por su evolución, Cristian Quiroga, su papá contó la ‘milagrosa’ historia de vida de su primer hijo.
Todo comenzó cuando Melisa (27) empezó a tener problemas de presión. Ella llevaba alrededor de 16 semanas de embarazo y debía someterse a continuos controles. Al llegar a la semana 26 de gestación, la obstetra le aconsejó a la pareja una cesárea inmediata. “Nos dijo que corría peligro la vida de la mamá. Y que si Iker tenía una mínima posibilidad de vida era afuera de la panza”, contó Cristian.
El momento de la internación fue el más complicado para la pareja. Cristian estaba tan asustado que decidió hacer una promesa a San Expedito: si su mujer y su hijo evolucionaban bien, se haría un tatuaje con la imagen del Santo. Mientras tanto, Melisa les rezaba con todas sus fuerzas a la Virgen de Guadalupe y la Virgen de Lourdes.
“Mi hijo nació el 18 de abril, justo un día antes del Día de San Expedito. Yo lo vi y lo escuché, lloró. Eso me tranquilizó un poco”, confió el flamante papá.
Sin embargo, lo que llegó después no fue fácil. “Era tan chiquito, tan flaquito. Estaba en la incubadora y, a la vez, adentro de una bolsa. Tuvieron que ponerle oxígeno y eso llegó a no alcanzar en dos oportunidades. En una de ellas, debieron reanimarlo manualmente durante dos horas”, comentó Cristian, quien aseguró que permaneció en Neonatología del Sanatorio Argentino todo el tiempo que pudo para estar cerca de su bebé.
Superados los días, Iker comenzó a respirar mejor, empezó a succionar la mamadera y llegó a pesar los 2 kilos aquellos que parecían inalcanzables. “Con esas condiciones, cuando cumplió 94 días de nacido le dieron el alta. Fue duro, llegó un momento en que sólo podíamos esperar que pasara el día, no podíamos pensar qué pasaría una semana después. Pero ya estamos los 3 en casa y si todo sigue bien, pronto toda la familia podrá conocer a Iker”, comentó esperanzado el papá.
