Lorena Atencio, Maximiliano Balderramo y sus dos pequeños hijos están desesperados. Se fueron de vacaciones a Punta y no pueden regresar. El cierre de fronteras por la pandemia de coronavirus que afecta al mundo los obligó a quedarse.
"Nos vinimos unos días en familia y cancelaron el vuelo de Copa Airlines que teníamos para hoy. Íbamos a Panamá y de ahí a Mendoza. Ayer fuimos con mi familia al aeropuerto a ver si nos podíamos subir a un avión y nos dijeron que no. Nos anotaron en una lista para esperar que el gobierno de acá dé permiso a volar a las demás compañías. Sale un vuelo de Aerolíneas pero no nos dejaron subir porque están priorizando a sus pasajeros", dijo Lorena al borde de las lágrimas, en diálogo con DIARIO DE CUYO.
"Estamos desde el miércoles hasta hoy que era nuestra partida. Es difícil comunicarse con cancillería, parece que están muy saturados. Hemos empezado a contactarnos con otros argentinos porque sentimos que estamos solos, a la deriva. Los hoteles están todos cerrados acá. Estamos en el hotel y no nos vamos a ir hasta no encontrar una solución. No sabemos cuándo ni cómo vamos a volver", agregó.
Dolida, Lorena siente que se están quedándose solos. "Tengo la sensación de que se está priorizando lo de Nueva York, Estados Unidos, Europa. No sé si nos están dejando para el último. En Copa Airlines nos dijeron que nos iban a reconocer nada porque no era un problema de ellos lo que estaba pasando. No tengo pasaje porque supuestamente el pasaje que tengo no vale nada. Me dijeron que me lo tenían que endosar para transferírmelo en Aerolíneas, pero en Aerolíneas Argentinas me dijeron que no aceptaban ningún endose y que ellos van a priorizar sus pasajeros", dijo.
"Estamos bastante angustiados, estoy tratando de mantener la calma. No saber qué va a pasar, no tener respuestas. La agencia donde compré el pasaje está moviendo cielo y tierra, no nos han dejado, pero no les responden tampoco", manifestó.
Para colmo de males, la mujer aseguró que no quieren salir del hotel porque "están robando mucho, se abusan de la gente extranjera". "Estamos guardándonos acá, tratando de no ocupar lo que tenemos porque no sabemos cuánto más vamos a estar acá. Esa es la desesperación que tenemos. Nos dicen que hay que esperar. Trato de disimular delante de los niños", dijo.
"En la aerolínea nos dijeron que nos íbamos en abril. Yo no tengo recursos ni donde quedarme. En el hotel en el que nos hospedamos dicen que alguna solución íbamos a encontrar, pero acá hay que pagar".