Con la modificación reglamentaria impuesta este año, sacando de circulación las motocicletas como vehículos auxilios, la tarea de abastecer a los ciclistas no es una materia simple. Por varias cosas, pero primero porque a diferencia de Europa donde todos los coches son iguales y la mayoría medianos, el hecho de que se utilicen camionetas o combis, complica el tránsito dentro de las rutas angostas.
Ahora es común ver como se van alternando en pasar al frente de la caravana para llevarles las botellas de agua o gaseosa, a sus corredores (en la foto se observa como los dos muchachos que van en la caja de la camioneta del SEP hacen malabares para colocar en los bolsillos traseros de la malla de Ignacio Pérez, los envases que servirán para calmar la sed de él y de su compañero Elías Pereyra que integraban el grupo de seis fugados que definió la carrera ayer en 9 de Julio.