Sus socios volvieron a sonreír. Las autoridades retomaron las ganas de trabajar y de a poco las actividades volvieron a la normalidad en el Club Juventud Ullunera. Es que, después de varios meses de sufrimiento por una deuda ($75 mil) que no podían pagar y que ponía en riesgo a la institución, lograron sacar a flote al club más viejo de Ullum. Vendieron parte del terreno y evitaron el embargo. Ahora, aseguran que recibirán con mucha alegría los 98 años que cumplirá el club el próximo sábado.
Pensaron mil opciones para juntar el dinero que le debían a un abogado. Hacer peñas, fiestas, campeonatos de fútbol, rifas y muchas cosas más. Sin embargo, nada fue suficiente, pues el momento era muy elevado. Entonces, decidieron desprenderse de una porción del terreno. Y aunque fue una decisión muy dura para los que vivieron parte de su vida en el también llamado ‘El Club de la Familia’, fue la opción más rápida y efectiva.
Así fue que, tras dos llamados a asamblea, los socios de la institución votaron a favor de la venta una porción de terreno (30m x 30m), que no era utilizado por los socios. ‘El comprador es hijo de un hombre de Ullum y se comprometió a pagar en tres cuotas la deuda que manteníamos con el abogado’, dijo Alfredo Alí, el presidente del club.
Juventud Ullunera comenzó a transitar los momentos malos hace dos años cuando perdió un juicio de posesión veinteañal que inició una mujer que vive en el predio. Tras ese litigio, Margot de Sanz se quedó con la casa y con el terreno que la rodea.
Y además de perder esta parte del terreno, la Justicia dictaminó que el club tenía que pagar los honorarios del abogado litigante. Ahí comenzó la deuda que al momento del pago alcanzó los 75.000 pesos. La nueva comisión del club tuvo que enfrentarse a esta situación a principio de año cuando recibieron la notificación de embargo. Sin embargo, tras mucho esfuerzo lograron salir adelante.
Ahora, las autoridades del club buscan la forma de ponerse nuevamente en actividad. Es que deben actualizar las autorizaciones de planeamiento y tienen que modificar parte de la estructura del club que es antiquísima.
El club se fundó el 12 de octubre de 1915. Y lo armó un grupo de amigos. Uno de ellos fue el abuelo de Alfredo Alí, el actual presidente de la institución que está situada en calle Malvinas Argentinas, en plena Villa Ibáñez.