Nacieron para darles contención y la posibilidad de desarrollar su veta artística a chicos y jóvenes de escasos recursos. Pero hoy se han convertido en verdaderas orquestas que tocan hasta fuera de la provincia. Son las bandas de música de Villa Independencia (Caucete), Villa Mercedes (Jáchal), Valle Fértil, 25 de Mayo y Barreal, que surgieron por iniciativa de los propios vecinos. Con el tiempo, por su entusiasmo y convocatoria, consiguieron ayuda oficial, de ONG y hasta de empresas privadas.
Enzo Fernández es un joven albañil de 29 años que aprendió a tocar de oído la batería, la guitarra, el bajo, el charango y el bombo, porque no había en el una escuela de música o profesores que enseñaran en forma privada en su Valle Fértil natal. Situación que cambió gracias a su propia iniciativa. El año pasado habilitó el comedor de su casa para enseñar música, también de oído y con sus instrumentos, tanto a niños de escasos recursos como a los que no lo son. "La música es un puente para la inclusión y la igualdad de oportunidades para los chicos, y acá en el Valle no había posibilidades de aprenderla. Por suerte muchas personas se plegaron a este proyecto que sigue creciendo", sostuvo Enzo.
Actualmente esta escuela de música funciona en un salón municipal y cuenta con el apoyo del municipio y de los padres que organizan diferentes actividades para recaudar fondos y poder comprar instrumentos. Los chicos tocaron en la Fiesta Provincial del Chivo que se realizó en mes pasado en La Majadita.
Los integrantes de Sueña el Chañar, de Villa Mercedes, Jáchal, ya tuvieron también la oportunidad de mostrar su arte en diferentes eventos departamentales. Pertenecen a la orquesta infantil que nació en julio del año pasado gracias a la iniciativa de Carlos Lazo, el párroco de esa localidad, quien quiso usar la música para contener a los chicos del pueblo. "En este pueblo no hay un sitio donde los chicos puedan aprender idiomas, deportes o arte, ni siquiera hay una biblioteca. Van de la escuela a la casa, y de la casa a la calle, con todo el peligro que eso implica. Por eso quise que aprendieran música", contó el sacerdote.
A este proyecto se sumaron Viviana Aballay y Luis Capdevilla, profesores de piano y violín respectivamente que se ofrecieron a enseñar ad honorem, mientras que la Fundación Banco San Juan y la empresa minera Barrick, se encargaron de equipar la orquesta con guitarras, bombos, clarinetes y contrabajos.
Una empresa minera también colaboró para que, hace dos años, comenzara a gestarse la banda de música infantil de Barreal. También de la mano de una vecina de esa localidad calingastina, Teresita Basualdo, profesora de música que enseña en las escuelas de esa localidad, y que quiso que los chicos aprendieran a tocar los instrumentos con un objetivo muy ambicioso: llegar a formar una orquesta sinfónica. "No es un sueño imposible. Ellos están muy entusiasmados, más ahora que contamos con el apoyo de una empresa minera y del municipio de Calingasta que han colaborado con los instrumentos. Es que el municipio quiere que los chicos formen una banda para que toquen en los desfiles y actos protocolares. Sería un logro, sobre todo para los niños y jóvenes que jamás pensaron que iban a tener la posibilidad de aprender música gratis. Tengo la satisfacción de ver cómo cada días más chicos se suman a este proyecto", sostuvo entusiasmada la profesora.
La participación también creció en 25 de Mayo. Allí, en octubre de 2010, la banda infanto-juvenil de folclore comenzó a dar sus primeros pasos. Nació por iniciativa de Héctor Montenegro y Carlos Santana, dos músicos reconocidos del departamento que quisieron compartir gratuitamente su "sapiencia" con niños y jóvenes de escasos recursos. Proyecto que de inmediato contó con el apoyo del Gobierno local quien se encargó de comprar cuerdas para las guitarras de los estudiantes e instrumentos para quienes no tenían uno.
En menos de cuatro meses, los chicos sonaban como una verdadera orquesta y comenzaron a difundir su música por el departamento. Promoción durante la cual cosecharon una cantante. Amelia Apez, candidata a Reina del Sol 2010, se sumó como vocalista de esta banda que ya brindó un concierto en un Café Literario y en un festival, organizados en la villa Santa Rosa.
"La música es una herramienta que le ayuda a los chicos a concentrarse y tranquilizarse, potencia su coordinación motriz y ayuda a la socialización y, sobre todo a la integración. Por eso creo que no hay palabras de agradecimiento suficiente para la gente que, de manera desinteresada, le dio impulso a estas orquestas infantiles", sostuvo Luli Otiñano, directora de Cultura de 25 de Mayo.