El entrenador de River, Néstor Gorosito, admitió anoche que se quedó “con bronca” por el triunfo que se les escapó al final del partido que terminó 2-2 ante Gimnasia y Esgrima La Plata, pero aclaró que se tiene fe para seguir en su puesto y revertir la mala campaña. “Me voy con un poco de bronca. En el primer tiempo Gimnasia jugó mejor y nosotros nos fuimos en ventaja. En el segundo, tuvimos muchas chances, pero no lo pudimos liquidar y llegaron al descuento cuando estábamos más cerca del tercero. No supimos cerrar el partido”, reconoció Pipo, tras la igualdad en el Monumental que cerca del epílogo los privó de festejar los tres puntos que precisaban y pretendían. Y siguió con su análisis: “El equipo se tiró atrás con el dos a cero por la inseguridad que tiene, debido a que no se dan los resultados. Esperemos que podamos revertir esta situación, tengo la esperanza de que va a ser así”. Tras el pitazo final de Lunatti, la mayoría del público que estaba en la platea local optó por silbar e insultar a los jugadores. En cambio para el técnico de la Banda hubo más que nada una gran indiferencia. Gorosito también argumentó en la conferencia de prensa que “desgraciadamente no pudimos hacer los goles en las varias chances que se nos presentaron y Gimnasia, que casi no había llegado, nos empató”. Por último y consultado sobre el cónclave que hubo en la semana entre cuerpo técnico, referentes del plantel y máximos dirigentes, Pipo reveló que “se hizo más que nada como una manera de juntar fuerzas y tirar todos para el mismo lado. Es la única forma que pienso que podemos dar vuelta esta situación. Así que fue una reunión que la considero bastante positiva”.
