Considerado uno de los mejores dibujantes del país y un “artista de culto´ para sus colegas, la característica obra de Stupía -que fue invitado a la 30º Bienal de San Pablo, que tendrá lugar en diciembre- oscila entre el paisaje real y la abstracción total. Comenzó a exponer en 1972 y desde entonces realizó varias muestras individuales y participó en otras tantas colectivas en distintos puntos del mundo (desde China a Malasia). En 1992 recibió el diploma al mérito de la Fundación Konex, como una de las cien mayores figuras de la última década en las artes visuales argentinas, pero fue en 2006 cuando su carrera dio un gran salto: ese año realizó en el Centro Cultural Recoleta una retrospectiva consagratoria, y al año siguiente recibió el Gran Premio Salón Nacional y su obra ingresó en el MoMA (Museo de Arte Moderno) de Nueva York.