"Sí a las dos vidas" coreó en varias oportunidades la multitud de fieles cuando San Antonio llegó a la zona del altar en la plaza de Media Agua. En vez del tradicional "que viva San Antonio" los fieles gritaron en contra del aborto legal y recibieron al patrono sarmientino con canciones religiosas, banderas blancas y amarillas y levantando pañuelos celestes, símbolo de rechazo a la legalización de la interrupción de los embarazos. Así se realizó la tradicional procesión en honor a San Antonio, el patrono de las causas perdidas. Desde la organización dijeron que hubo unas 25.000 personas y muchas de ellas llegaron a Media Agua pidiendo por el "respeto a la vida".
Ayer en la siesta, Sarmiento se vistió de fiesta al mismo tiempo que el Congreso de la Nación trataba el proyecto de la legalización del aborto, por eso el "Sí a la dos vidas" fue uno de los lemas de la procesión en Media Agua. Hubo gente que llegó con los pañuelos desde sus casas y otras personas que recibieron el símbolo celeste de mano de fieles sarmientinos. Y todos tuvieron el mismo objetivo: mostrar su postura ante este delicado tema. Es por esto que las mujeres argentinas, las embarazadas, los bebés que están por nacer, los vientres maternos y hasta la "iluminación de los legisladores" fueron algunas de las intenciones por las que se rezó durante la peregrinación de ayer. El rechazo al aborto no sólo fue parte de las peticiones de los peregrinos. Los animadores de la procesión y hasta algunas palabras de monseñor Jorge Lozano estuvieron en concordancia. "Pidamos a San Antonio que nos ayude a ser felices en la entrega de la vida" fue una de las frases del Arzobispo durante la homilía.
ROSARIO TORRES Peregrina
"Vine desde Albardón. Salimos a las 9 de la mañana para llegar a tiempo, porque hoy no podíamos dejar de participar de esta fiesta. Venimos a pedir por la vida y las familias".
LAURA ROQUEBLABE Peregrina
"Vine desde la Parroquia de Concepción con mi hermana. Es un día muy especial y trajimos nuestros pañuelos celestes para decirle sí a las dos vidas, y sí a las familias".
NICOLÁS PACHECO Peregrino
"Soy de Pocito. No estoy de acuerdo con que se legalice el aborto, es matar a una persona indefensa. Acepté ponerme el pañuelo celeste para mostrar mi postura y la de mi familia".
LIDIA FERNÁNDEZ Peregrina
"Siempre vengo a la procesión de San Antonio. Hoy es un día muy importante y todos tenemos que pedir para que Jesús nos guíe y que suceda lo que sea lo mejor para todos".
San Antonio fue el protagonista de la peregrinación y su séquito también ocupó un rol muy importante durante la procesión de ayer. Es que el patrono de Media Agua estuvo acompañado de muchos niños que fueron caracterizados y se robaron las miradas de los demás fieles.
Los niños de jardín de infantes del Colegio San Antonio de Padua, de Media Agua, fueron los más llamativos. Vestidos con túnicas marrones, similares a las del santo, los chicos fueron los que encabezaron al columna de feligreses.
Después de ellos, hubo niños de academias de danzas que peregrinaron y le pusieron elegancia a la siesta sanjuanina y hasta algunos deportistas que también fueron vestidos con sus equipos. Así, el séquito del santo fue especial durante esta edición de la tradicional procesión.
La procesión se vivió con mucha alegría y a la vez con mucha ansiedad. Los fieles dijeron que este año la peregrinación era especial, pues al mismo momento los legisladores estaban haciendo historia al tratar por primera vez la legalización del aborto. Es por esto que muchos aprovecharon el cierre de la fiesta patronal de Media Agua para pedir la intercesión de Jesús en el Congreso. "Rogamos a Dios que no aprueben la ley", "pedimos por los diputados y por sus votos", "no queremos que el aborto sea legal", fueron algunas de las posturas de los promesantes de San Antonio, durante la peregrinación de ayer que fue una de las más multitudinarias de los últimos años. Pues el año que más gente se había reunido fue el pasado, cuando hubo 20.000 personas. En esta edición del festejo, ni el frío intimidó a los feligreses que caminaron junto al patrono de las causas perdidas.