Este 2 de julio, la Luna coincidirá con el Sol provocando un eclipse total que se podrá ver en la zona central de Argentina y se observará en todo su esplendor desde San Juan. Como consecuencia, en algunas zonas habrá dos minutos de oscuridad total en pleno día. El fenómeno llamativo, que demora cientos de años en volver producirse en un mismo lugar, ha generado curiosidad y especulaciones a lo largo de la historia.
A continuación, algunos mitos y creencias que idearon distintas civilizaciones en un intento por explicar este fenómeno astronómico:
* En China, la tradición decía que un eclipse se producía cuando un dragón intentaba devorar la luz del Sol para mandar un mensaje a los humanos. Desde la Tierra, se le respondía con tambores para asustar a la bestia. ¿El resultado? Siempre les funcionaba, porque después del ritual, el Sol se despejaba.
* En Perú creían que el eclipse era un mensaje para los hombres, ya que sostenían que el astro, enojado con los seres humanos, les sacaba su luz y calor. Por eso un eclipse presagiaba guerras y calamidades.
* Este fenómeno también era anuncio de guerra para los mayas. Si bien ellos, con mediciones y cálculos, eran capaces de predecir con exactitud cada eclipse, paradójicamente creían que era la Luna quien intentaba devorar al Sol, el Dios supremo. Lo interpretaban como símbolo de lucha entre los dos astros.
* Quienes aún hoy se preparan con mucha antelación a este fenómeno astronómico son los astrólogos. Ellos se basan en la ley de correspondencia y analogía que dice: “Como es arriba es abajo, como es abajo es arriba para que perpetúe el milagro de la Unidad”. Por lo que a un determinado evento celeste (macrocosmos) le corresponde otro igual las mismas características y en el mismo sentido en la tierra (microcosmos).
De esta forma ellos creen que los eclipses simbolizan cambios y movilizaciones. Son literalmente blanco o negro. Quedarse para siempre o dejar todo sin mirar atrás. Por eso, para la astrología al provocarse un eclipse se genera un conflicto que provoca una movilización, la crisis en cuestión puede tener que ver con un reordenamiento, una reorganización, un nuevo comienzo, un cambio radical o noticias inesperadas.
* La creencia más positiva alrededor de este fenómeno es la que tiene un tono romántico. Cuenta la leyenda que el Sol y la Luna estaban enamoradísimos, pero Dios les dividió el trabajo: a la luna, le ordenó iluminar la noche y al sol, el día. Desde entonces ambas sufren la desolación, pero cada tanto se reencuentran y se besan.
– Extrañas recomendaciones que se sumaron a lo largo de la historia para “sobrevivir” al eclipse:
* A las mujeres embarazadas se les aconsejaba no salir durante el fenómeno, ya que se creía que si la futura madre miraba el eclipse, el bebé nacería lleno de lunares o manchas. También decían que el eclipse adelantaba el parto y que los bebés nacidos en esos días tenían dotes especiales o nacían con deformaciones. Por supuesto, la ciencia ha desmentido todas estas creencias.
* Muchos acusan a los eclipses de ser responsables de cambios en el carácter, peleas y rupturas de pareja. Por eso recomiendan que, para contrarrestar los efectos negativos de un eclipse, hay que ponerse ropa (interior y exterior) roja, y llevar elementos metálicos como alfileres de gancho y llaves en todos los bolsillos.
* Hay quienes sostienen que hay que ubicarse en algún lugar de la casa donde no llegue la luz del Sol y poner tijeras debajo de la almohada o detrás de la puerta en forma de cruz para salvarse de los efectos malignos.