Sin duda alguna, Argentina será un país cuyo crecimiento se dará a mediados del 2013, por mas mínimo que este sea, hay muchas perspectivas de avances a nivel estratégico en el ámbito financiero. Sin embargo, la recesión económica que afecta al mismo desde este 2012, está haciendo impacto negativo para que nuestro país se expanda con el máximo esplendor y con los resultados que desearían obtener tanto gobernantes como habitantes.
Lamentablemente los pronósticos para Argentina en el próximo 2013, no son demasiados alentadores, pues la enorme restricción política existente y que además quizás estemos transitando por un sistema industrial erróneo, no permite que la nación pueda llegar a los márgenes de productividad deseados, si a esto le sumamos una escasez o falta de ayudas externas.
Tampoco descartaremos que existirán descontentos continuos de sus ciudadanos por los modelos adoptados para "salvar’ de alguna forma algo que podría ser inevitable, como una crisis financiera y social por demás extrema, derivando a conflictos internos, inseguridad en la sociedad y en la economía.
Sin embargo, a no desanimarse, pues no olvidemos que el Hexagrama de este Año de la Serpiente es el 49, y si hacemos memoria, se refiere en una actitud de cambio tal, tanto para los encargados de guiar los caminos de la Patria como para los ciudadanos de cooperar a que las energías sean aprovechadas en pos de una transformación positiva y prolija del actual esquema político – financiero, agilizando de este modo, que Argentina, se recupere en tiempo y forma de todo tipo de fracturas.
En conclusión, quizás este no sea un año prospero, pero si, a punto de dar un importante paso para que su economía, se convierta en uno de los mas consideradas e importantes a nivel internacional.