Dos de los más reconocidos constitucionalistas, Gregorio Badeni y Féliz Loñ coincidieron ayer en la validez de la votación en el Senado que con la simple eliminación de un artículo de la ley de cheque le dio media sanción al plan de la oposición de repartir los fondos recaudados por el impuesto en su totalidad no el 70-30 que rige actualmente. El impuesto al cheque “no es un impuesto cuya percepción corresponde a la nación sino un impuesto local”. “Pero si no tiene una asignación específica especial, entonces es coparticipable. Y el Congreso, por simple mayoría de votos, puede declarar que corresponde la coparticipación de ese impuesto que originariamente le corresponde”, expresó Badeni. Por eso, el especialista está convencido de que esa ley y la decisión de modificarla para que los fondos sean plenamente coparticipables “se puede establecer por la mayoría de los miembros presentes con quórum y no requiere un voto de la totalidad de los miembros de la Cámara”. Por su parte, Loñ resaltó que lo que se planteó en el Senado fue “la derogación de un artículo” con la que se vuelve a “reintegrar” el impuesto como un tributo coparticipable. “Todos los impuestos son coparticipables menos los derechos de importación y exportación que son exclusivos de la Nación. Pero, por un juego perverso de asignaciones específicas, se ha ido sustrayendo a las provincias de fondos importantísimos”, analizó el especialista, que, por eso, concordó con Badeni en que lo votado ayer en el Senado es válido y acorde con el texto de la Constitución Nacional.
