El estadio de Estudiantes estuvo repletó. Incluso 15 minutos antes del inicio del juego, las colas para ingresar superaban los 200 metros. Entre tantos hinchas, estuvo sentado en la platea, como uno más, el padre de Pablo Aimar. Es que el Payasito, surgió en ese club y su padre es un hincha fanático.

* Espectacular. El recibimiento para Estudiantes cuando ingresó a la cancha fue impactante, desde los cuatro costados cayeron infinidades de serpentinas y papelitos. Los mismos que antes fueron repartidos por gente del club. Eran tantas las serpentinas dentro del rectángulo de juego, que el inicio del partido se demoró 10 minutos hasta que limpiaron todo.

* A casa. Tras la derrota, el plantel de Del Bono fue a cenar y luego emprendió el viaje de regreso, vía carretera, hacia San Juan.