Con ‘Kindlus‘, Karen Tumbarello se encontró con la posibilidad de probar cómo hace una sola persona para vender y sostener su empresa y está contenta con el resultado. ‘Para definir mi elección de producto, me basé en las preferencias de mis amigas y que una mujer siempre necesita un alhajero para guardar sus cosas. Lo mismo me pasó con las cajas de té que son muy buscadas y el boom en las ferias de artesanías‘, dijo. Con diseños coloridos y con finos detalles en pintura, usó tanto cajas armadas en MDF como otras en madera que fueron hechas por su tío. ‘La ventaja de fabricarlas es que se pueden variar los modelos, los calados y los tamaños‘, comenta mientras señala una de sus creaciones, estampada con servilletas en decoupage.