Apenas amaneció, la casa de los Riveros se convirtió en una rotisería popular. Mujeres, hombres y hasta niños de 10 familias de Campo Afuera, Albardón, madrugaron para comenzar a trabajar en lo que llamaron ‘Día de la Patria entre vecinos’. Unieron esfuerzos para preparar y repartir gratis locro entre la gente de la zona. Entregaron 200 viandas de esta comida típica que cocinaron de manera tradicional, al calor de las llamas. Al festejo se sumaron otros lugareños que adornaron la calle con banderas y globos albicelestes.
Carlos Riveros fue el propulsor de la idea. Mientras trabaja en un parral junto a algunos vecinos, propuso hacer una ‘locreada’ para compartir gratis el 25 de mayo y celebrar el Día de la Patria. Y 10 familias se sumaron a la propuesta y de inmediato comenzaron a organizar el trabajo. Quienes tenían productos de carneo aportaron la panceta, los huesos y los chorizos, mientras que las demás familias se encargaron de comprar los porotos, el maíz, los condimentos y el zapallo para completar la lista de ingredientes. ‘Cada uno aportó lo que pudo para preparar el locro. Logramos reunir ingredientes para preparar 200 raciones. Quisimos hacer esto para celebrar el Día de la Patria con unión y solidaridad, porque a lo mejor hoy hay vecinos de Campo Afuera que tienen poco o nada para comer, así que les vendrá muy bien un plato de locro caliente’, dijo Carlos Riveros.
Dividieron el trabajo por habilidad. Las mujeres con más fuerza de brazo se encargaron de abolillar la masa para preparar las 150 sopaipillas que también repartieron entre los vecinos. Las con mejor ‘sazón’ se encargaron de hacer el locro, siguiendo la receta de las abuelas. Los hombre se encargaron de mantener encendido el fuego para la cocción de ambas recetas y los niños repartieron las escarapelas que hizo una de las mamás y las sopaipillas entre los vecinos. Todo con música de folclore de fondo para lograr un ambiente de tradición. Con ese mismo objetivo, el dueño de casa colocó una bandera albiceleste en el frente de la vivienda. El estandarte completó la decoración patria que hicieron otros vecinos con globos celeste y blancos que colgaron a los ancho de la calle. Pero eso no fue todo. Cerca del mediodía llegó Eduardo Muñoz en su bicicleta, trayendo varias banderitas argentinas de nylon. Junto a la ayuda de los chicos las colocó una al lado de otra en una piola para colgarlas luego en forma de gallardete.
A las 13 el locro estuvo listo. A esa hora, los vecinos ya habían formado fila para llevarse su porción, aunque algunos prefirieron quedarse en la vereda de la casa de los Riveros para compartir el almuerzo que finalizó con una mateada con sopaipillas.

