Peinada prolijamente y perfumada a más no poder, Milagros Corbo no pudo disimular la alegría que le generó saber que iba a salir en el diario. Y es que, después de haber pasado más de 15 días internada, de haber corrido peligro su vida y de soportar tres operaciones en el Hospital Rawson, la pequeña de 5 años que sufre hidrocefalia, lleva de nuevo una vida normal. ’Me encanta jugar en la calle con mis amigas’, dijo.
Después de que le colocaron la válvula para que elimine el líquido de su cabecita, la nena volvió al ruedo. Se siente libre nuevamente y disfruta de su buen estado de salud al máximo. Se levanta temprano, desayuna y casi de inmediato busca a su hermana Luana (gemela) y sale a la calle. Así empieza la excursión que hace por casi todas las casas del barrio Talacasto, en Chimbas, donde es muy querida por todos los vecinos.
Su muñeca favorita se llama Chuqui, sin embargo Karina Riberos, su mamá dice que son pocas las veces que juega con los juguetes dentro de la casa. ’Me gusta jugar al arroz con leche y a las escondidas’, dijo la pequeña que habla muy poco, pero que nunca borra su sonrisa.
Con una mirada pícara y muy pendiente de las lágrimas que se le escaparon a Karina, Mili contó que extrañaba su casa y a sus amigos. Y dijo que aunque le gustó la comida del Hospital Rawson, aseguró que es más rica la de su mamá.
Milagros recibió el alta hace poco más de una semana. Y desde que llegó al barrio, entra a su casa sólo a dormir. ’Hay días que ni come con nosotros’, dijo Karina y aseguró que para ella esa vida juguetona que lleva la pequeña es lo que la mantiene bien. ’Los médicos dicen que tiene bien puesto su nombre. El neurocirujano no nos creía que estaba atendiendo a Milagros. Pensaba que era su hermana gemela. Es que tiene un daño neuronal grande, pero no se nota’, dijo la mamá que contó que la pequeña salió caminando del hospital. A la vez dijo que la única secuela que tiene hasta el momento es que camina con las piernas muy abiertas porque si no pierde el equilibrio.
Si bien está ansiosa por volver a la escuela, le da vergüenza su corte de pelo. Es que, le pelaron la mitad de la cabeza para poder intervenirla. Pero a pesar de la vergüenza nada la para a la hora de callejear. Karina dijo que la nena tiene que volver a control la semana que viene, pero que hasta el momento hace una vida totalmente normal.
El problema de Mili se hizo público luego de que su mamá denunciara que la nena había empeorado porque uno de los médicos no la había atendido a tiempo. Esto sigue siendo investigado por las autoridades del Hospital Rawson. Según Karina, le dijeron que al parecer hubo falta de comunicación, por eso el médico no llegó y Mili sufrió el paro cardiorrespiratorio.

