A pocos días de que saliera a la luz el caso de una maestra que maltrataba a los chicos de 3er grado de una escuela de Concepción y que colgaba ropa interior dentro del aula, sobre su bicicleta (ver aparte), ayer se dio a conocer otro conflicto escolar en el que está involucrada una docente. Pero fue en un colegio privado. Desde Prensa del Ministerio de Educación dijeron que el hecho ocurrió en el Colegio La Inmaculada y la maestra fue echada porque padres denunciaron que les tapó la boca con cinta a varios chicos de 2do grado. Ante esto, Isabel Rostagno, la docente despedida, dijo a DIARIO DE CUYO que eso ‘no sucedió‘.
Según Educación el hecho ocurrió hace un mes. Sin embargo recién salió a la luz ayer. Desde Prensa de esta repartición explicaron que el problema surgió cuando papás de los alumnos denunciaron que la docente de Plástica amordazó a los chicos con cinta para que se callaran. Esto llevó a que la maestra fuera sacada de su puesto de trabajo. Dijeron que la Dirección de Educación Privada acompañó a la escuela en este proceso, pues esa institución tiene poder de despedir a sus trabajadores sin la intervención del Ministerio. Esto es porque se trata de un establecimiento privado. A la vez, contaron que, tras algunas entrevistas con los docentes y hasta papás, la maestra admitió el hecho. DIARIO DE CUYO consultó a la docente sobre lo sucedido, y dijo que nunca les cubrió la boca con cinta a sus alumnos.
‘Esto sucedió hace un mes. Fue una decisión que tomamos con los directivos del colegio, luego de una entrevista. Fue una situación que surgió en el aula y fue un hecho muy particular. Entonces se acordó rescindir el contrato de trabajo. Esto fue por el bienestar de los padres y de los niños del colegio. La situación no llegó a ese límite, por eso no quiero que se me señale de la manera que se está haciendo‘, dijo a este medio y confesó que se sentía muy mal ante esta situación pues ella ya había dejado este acontecimiento en el pasado.
Sin dar mayores detalles de lo que causó su desvinculación con el colegio, reiteró a DIARIO DE CUYO que se fue ‘de común acuerdo‘ y dijo que lo de la cinta en la boca de los chicos ‘no sucedió‘.
‘Nunca atenté contra la salud física ni emocional de los alumnos. Son situaciones mal interpretadas. Con los chicos no hubo una situación agresiva desde ningún punto de vista. El trabajar con las personas puede hacer que ante un desacuerdo o un hecho de incomodidad se vean afectadas las sensibilidades. Antes de que esto llegara a suceder o pasara algo peor, se decidió cortar y darle tranquilidad a todos‘, explicó la maestra.