Cipolletti > Los dos galpones de la empacadora de Allen de donde presuntamente habría salido el contenedor que fue secuestrado en la aduana de Buenos Aires con 1.625 kilogramos de cocaína escondidos entre cajones de manzanas fueron cerrados momentáneamente, ya que en la jornada de hoy serían allanados por personal policial.
La vivienda del propietario también será registrada ya que la Policía presumía que podría hallar más droga en el lugar. Al cierre de esta edición, la orden de allanamiento no había sido librada por el Juzgado Federal, por lo que continuaban a la espera para ejecutar el procedimiento.
Personal de Aduanas, Gendarmería y la División de Toxicomanía de la Policía bloquearon el ingreso a dos galpones de empaque de Allen y la casa del propietario, a la espera de las órdenes de allanamiento. La causa la lleva adelante un juzgado Federal, por el hallazgo de más de 1.600 kilos de cocaína, en el puerto de Capital Federal.
Se preveía requisar los edificios por la presunción de que existiría “más mercadería”, es decir, droga de la que fue secuestrada el miércoles. Así lo aseguró a este diario uno de los coordinadores del operativo que, durante todo el día, mantuvieron bloqueados los galpones y la vivienda, esperando el exhorto que les permitiera inspeccionarlos.
Desde la delegación regional de Gendarmería, confirmaron que las pesquisas se relacionan directamente con el hallazgo de los 1.625 kilogramos de cocaína en Buenos Aires. “Todo salió de estos galpones”, confió un uniformado en referencia al cargamento de fruta declarado en aduana. Es por esto que se dispusieron los allanamientos en la empacadora de Allen.
A la espera
El operativo, continuidad del denominado Manzanas Blancas, comenzó muy temprano, con la custodia de distintos predios, que pertenecen a un allense de apellido Hinriksen.
Sin embargo, fue poca la actividad para los seis efectivos de Toxicomanía y los tres equipos de Aduana y Gendarmería. Es que hasta después de las 20.30 la orden de allanamiento no había llegado a manos de los responsables. Todo se limitó a la guardia en las tres ubicaciones, dos sobre la calle Primeros Pobladores y otra sobre Ruta 65.
En la sede de “Frutol SRL”, ubicada en Primeros Pobladores 470, fue donde se concentró el mayor movimiento.
Cuatro vehículos que salieron de la empacadora fueron registrados por personal de Toxicomanía pero no les halló nada sospechoso. Uno de los vehículos era conducido por el hermano del propietario del galpón. Lo curioso fue que, según información recogida en el lugar, el dueño de la empresa se encontraría en Buenos Aires.
La empresa exportadora sería “Frutal”, una firma radicada en la provincia de San Juan que comercializaría la marca “Brisa”. El despachante sería de Bahía Blanca, tal como informó la edición central de este diario ayer.
La extensa espera por los permisos escritos para que el personal de las Fuerzas de Seguridad ingresara a las dependencias hizo pensar que los operativos serían realizados hoy, pero fuentes afectadas al desarrollo de los allanamientos manifestaron que “una vez que la orden llegue, será ejecutada”.
Durante la jornada, Gendarmería envió varios grupos operativos y altos mandos de la delegación regional con asiento en Neuquén llegaron hasta Allen para constatar el desarrollo de los operativos.
