Ayer se realizó el desfile oficial en honor a Domingo Faustino Sarmiento por el 124to aniversario de su muerte. Y se hizo en tiempo récord. Duró menos de 30 minutos, una hora menos que en el 2011, y participaron los cuerpos de bandera de 200 escuelas del Capital y del Ministerio de Educación, y algunos miembros de las Fuerzas Armadas y de Seguridad. Pero eso no le quitó emoción a la marcha que se hizo ante unas 1.000 personas.
El mes pasado también se hizo un desfile en menos tiempo de lo pensado. Fue en Albardón y en honor al general José de San Martín donde todos los participantes marcharon, en 75 minutos, casi al trote a causa de la lluvia.
Los actos arrancaron con total puntualidad y sin pérdida de tiempo. Hasta la concentración de los participantes fue rápida. Los abanderados que estuvieron frente a la Casa Natal donde se le rindió el primer homenaje al prócer, sólo tuvieron que caminar dos cuadras para comenzar a desfilar. Y en menos de 10 minutos completaron el recorrido por Libertador desde Alem hasta Mendoza. Es que desfilaron todos juntos y en hileras de 5 para ocupar el ancho del carril sur de la avenida. El año pasado participaron del evento grados completos de cada escuela capitalina y las maestras de cada una de las provincias argentinas que recibieron la distinción de Maestro Ilustre que otorga la Nación y que en el 2011 se entregó por primera vez en San Juan por conmemorarse el bicentenario del nacimiento de Domingo Faustino Sarmiento. En esa oportunidad también desfilaron instituciones deportivas, agrupaciones gauchas y academias de danzas de Capital, cosa que no sucedió este año.
Pese a que se anunció que este año tampoco desfilarían las Fuerzas Armadas y las de Seguridad, sí lo hicieron aunque con menos participación y despliegue que el año pasado, ya que no participó del evento ningún vehículo ni escuadrón especial de estas fuerzas como en el 2011.
Los soldados del RIM 22 fueron los primeros en desfilar y lo hicieron cantando una marcha militar. Luego hicieron su paso los efectivos de Gendarmería, de la Policía y del Servicio Penitenciario en último lugar. A pesar que su paso ante el público duró menos de 20 minutos, ese tiempo fue suficiente para cosechar el aplauso de la gente, especialmente de los niños, que usaron cámaras y celulares para sacarle foto a los uniformados.
Pero quedaba más y sucedió ya cuando había terminado el desfile. Es que arribaron a la Casa de Sarmiento los hombres que pedalearon desde Córdoba para concretar una cruzada por la educación, por segunda vez. Los recibió el gobernador Gioja, quien los acompañó a recorrer la casa del prócer. Pero ese paseo se demoró porque la gente que había concurrido al desfile rodeó a los cordobeses, entre los que estaba el hijo del locutor Rony Vargas, para saludarlos.

