En estas expediciones no sólo se trata de fortalecer el físico, también da la posibilidad de hacer turismo, ya que a lo largo de la travesía se pueden conocer lugares como glaciares, arroyos, portezuelos y sitios de interés paisajísticos. Por otra parte en los momentos de ocio se hacen las clásicas fogatas que invitan a saborear exquisiteces en el almuerzo y la cena, con productos artesanales de la comida argentina, en especial la sanjuanina, siempre preparadas por los guías.