�El precio de la docena de empanadas estuvo unificado: $35. Pero no sólo se podía comprar eso, sino que hubo ranchos con comidas rápidas, stands de venta de helados artesanales y hasta puestos con tragos con alcohol, que tuvo al fernet con coca como el más pedido. Hubo también un sector con juegos para niños y otro de artesanos.
