Juan Bautista Del Bono fue gerente de Marenco y Cereseto hasta 1890, año en que se retiró y fundó la bodega Del Bono. Todo comenzó en 1888 cuando elaboró 200 bordelesas de vino en su casa y que vendió a la misma firma. El rédito fue mayor a los sueldos de los 7 u 8 años que había trabajado como gerente. Este fue el paso inicial de la bodega Del Bono que levantó al lado de la bodega de Cereseto.
Del Bono estaba casado con María Briano y tuvieron tres hijos: Bartolomé, Catalina y Carlos. Bartolomé nació en Buenos Aires el 1 de diciembre de 1875 y se casó en San Juan en 1902 con Enriqueta Lanteri.
Catalina contrajo matrimonio con otro grande de la vitivinicultura: Santiago Graffigna. Carlos, el menor, se graduó de ingeniero en minas y contador y fue quien administró la firma.
Con los aportes de sus hijos Bartolomé y Carlos, la empresa se ensanchó rápidamente agregándose un segundo y tercer edificio en 1903. La casa tenía una oficina y un almacén en Buenos Aires. Eran sus vinos blancos y tintos, además de los especiales destinados para la elaboración del vermouth en fábricas de Buenos Aires y La Plata. Producía 50.000 barriles al año.
El 21 de noviembre de 1908 muere Juan Bautista Del Bono. Sus hijos continúan con la firma al frente de la misma unos años más. El chalet donde vivió (hoy club Ausonia) era el más grande y elegante de la época. Bartolomé fue diputado provincial y a pedido de sus obreros en 1926 fue socio honorario del club Juan B. Del Bono en memoria a su padre. La bodega original se vendió y Bartolomé siguió con otras bodegas y viñedos y se dedicó de lleno a la producción de olivos, siendo un gran empresario en el rubro. Murió en mayo de 1960.
