“Maradona tiene que entender que cumple un rol determinado en la sociedad. Que representa a los argentinos. Por eso debe cuidar lo que dice, pese a que él mismo tenga otra óptica. Pero esto me parece un consentimiento implícito, porque a Maradona siempre se lo perdonó por ser Maradona. Entonces él se toma atributos que parte de la sociedad se los dio. No me gusta como técnico. No sabe transmitir un esquema táctico y queda sujeto al voluntarismo de los jugadores”.