Aunque hoy parezca difícil de imaginar, Pocito, el departamento de extensos viñedos y bodegas centenarias, fue uno de los que más tardaron en incorporarse a la actividad agrícola en la provincia. Una parte de su historia, tal vez la menos conocida, revela que fue el general José de San Martín, cuando era gobernador intendente de Cuyo, quien dispuso la construcción del Canal del Sud o canal Pocito, permitiendo así el surgimiento de la actividad agrícola que hoy define el perfil del departamento y que cimentó su crecimiento. El dato, fundado en documentos, entrevistas orales y archivo de la época, forma parte de las investigaciones recopiladas por la Junta de Estudios Históricos de San Juan (ver aparte) en un libro que reúne trabajos sobre San Martín y el Bicentenario.
Los hechos de los que da cuenta la investigación reviven los días de 1818, cuando José de San Martín era gobernador intendente de Cuyo. Al igual que otras zonas de San Juan, Pocito no tenía agua de riego. Sus tierras, que guardaban en su entraña fértil el tesoro de la vida, no podían cultivarse por falta de agua. Es que la colonización española había alumbrado pueblos en aquellos lugares donde los canales de riego construidos por los huarpes permitían la agricultura y Pocito no tenía un canal.
La determinación de San Martín de recompensar el respaldo de los sanjuaninos al Ejército de Los Andes se materializó en un contrato firmado en agosto de 1818, por el cual se autorizó la construcción del canal del Sud o Pocito, "que cruzaría los campos de norte a sur con un ancho de 5 varas hasta una legua y media y de 4 hasta su terminación que calzara una vara de agua con toma propia en el río", según expresan los documentos citados en el trabajo. Continúan explicando que "la obra en principio consistía en desviar el arroyo del estero de Zonda por medio de un terraplén, en el sitio denominado El Topón, cerca de Marquesado. Se comenzó en 1818 y se terminó un año después, al pasar el primer caudal del río San Juan por Pocito rumbo al sur".
Con el canal construido, la venta de tierras fiscales permitió que conocidos vecinos establecieran sus cultivos en la zona. El trabajo confirma que "figuran entre otros, don Francisco Yanzón, en tierras llamadas de la Independencia o la Carpintería; don Francisco Flores, con 400 cuadras; Tadeo y José Rudecindo Rojo, José Leandro Jofré, José Silva, Pedro e Hilario Gil, todos registrados en 1819". Algunos de los apellidos antiguos, como Flores, Gil y Yanzón, permanecen en la zona a través de la presencia de sus descendientes.
"Poco a poco -dice la investigación- la vida de la zona se fue ampliando y surgieron los oratorios y las escuelas". Finalmente, hacia 1880, Pocito contribuyó a la transformación económica de San Juan consolidando sus bodegas, gracias a dos factores importantes: la llegada de los inmigrantes y el ferrocarril, que terminaron de definir el perfil del departamento.
El trabajo de investigación, que lleva la firma de la historiadora Nelly Alicia Burgués, avanza en el relato de los años posteriores, rescatando también la figura de quien fuera gobernador de San Juan, José Ignacio de la Roza, en la construcción del canal primigenio que permitió el surgimiento del departamento y que hoy sigue regando amplias extensiones de norte a sur, con el nombre de canal Céspedes.

