La semana pasada se escuchó otra respuesta oficial a cuestionamientos del ámbito judicial, en este caso Federal. El camarista Juan Carlos Turcumán había dicho en no “hay un lugar para rehabilitar a los adictos adultos” y que no se ejecuta una política para tratar “en serio” el problema. El que le salió al cruce fue el ministro de Desarrollo Humano, Daniel Molina, a cargo de las instituciones de rehabilitación de jóvenes adictos. Le contestó en tono irónico que “me da pena que haya dicho eso” y que debería “tomar contacto con la realidad”. Además, aseguró que la provincia financia la recuperación de más de 100 adultos en otras jurisdicciones.
