�Lo consideran el arquitecto jurídico de Cristina Fernández de Kirchner. El funcionario que le da forma legal a las más controvertidas ideas del poder kirchnerista: la estatización de las AFJP, la ley de medios, la puja por las reservas del Banco Central, la reforma electoral o hasta el Fútbol para Todos. Sin olvidar la reforma judicial.
Abogado, de 59 años, Zannini, es señalado como el funcionario de mayor trato diario con Cristina. Fue designado secretario de Legal y Técnica con la llegada de Néstor Kirchner a la presidencia en 2003.
Se decía que al despacho de Kirchner, Zannini entraba sin golpear. Quizá no suceda lo mismo con su viuda, pero no hay duda de que el hombre al que apodan ‘el Chino‘ es de los pocos, por no decir el único, que integra el ámbito de consulta presidencial.
Nació en la cordobesa Villa Nueva. En la secundaria adquirió fama de sabelotodo. Una vez recibido de perito mercantil, Zannini se fue a Córdoba capital a estudiar en la Facultad de Derecho.
Con el retorno de la democracia, viró su vida: enfiló hacia Santa Cruz, donde estaba su compinche Jorge Chávez, miembro del Tribunal Oral Federal de Río Gallegos, quien le dio una mano para entrar en Fiscalía. Tras afiliarse en 1985 al Partido Justicialista, militó con Kirchner en Río Gallegos. Zannini fue también el arquitecto jurídico de las dos reformas constitucionales y del sistema electoral que le permitieron a Kirchner acumular mandatos como gobernador.