La presidenta Cristina Fernández condenó ayer el intento de golpe de Estado que se registró el jueves en Ecuador, algo “impensable” en Argentina, aunque señaló que también “hay sutiles formas de desestabilización” en el país, como “mentir, engañar, tergiversar y tratar de que nos enfrentemos entre argentinos”. La mandataria evaluó que la insurrección en Ecuador en rechazo a recortes salariales y laborales fue una mera “excusa” porque, en verdad, se trató de “lo que han intentado hacer en muchas partes de nuestro continente: tirar abajo las conquistas y los avances sociales que han logrado los pueblos de mano de los gobiernos nacionales y populares. Han intentado golpear una y mil veces, con distintas formas”, dijo la mandataria en su mensaje.