Pantalones oxford, lentes grandes y pañuelos coloridos en la cabeza los hicieron rejuvenecer, mientras que el Rock de la Cárcel los hizo viajar en el tiempo. De esta forma, y con una alegría envidiable, las cerca de 800 personas que participan de las Pistas de Salud, en Capital, cerraron el año con una fiesta. Fue anoche en la plaza Hipólito Yrigoyen.
Desde temprano, las remeras naranjas invadieron la plaza. Mesas colmadas de comidas y refrescos hicieron que el típico paisaje de ese espacio verde pareciera un camping. Mientras que el paso de las horas convirtió al anfiteatro de la plaza en un boliche en donde sólo faltaron las bolas de espejos.
‘Nos prestaron las pelucas de colores para bailar y ahora parecemos un grupo de adolescentes‘, dijo Ramona Cáceres, una de las alumnas. Es que los profesores de las Pistas de Salud, totalmente lookeados para la ocasión, hicieron que el rock que se escuchó varias cuadras antes de la plaza, contagiara alegría en todos. Y casi ninguno se quiso quedar sentado. Así fue que un baile multitudinario hizo que hasta los autos que pasaban por los alrededores de la plaza se detuvieran a mirar el espectáculo.
Con los collares con el símbolo de la paz y con vinchas para sostenerse las pelucas, dejaron de lado los años 70’ y bailaron cuarteto. Hicieron el clásico trencito y posaron para las fotos. ‘Siempre nos sacamos fotos para recordar estos momentos‘, dijo María Elena Ejarque, de Trinidad, que en ningún momento dejó su camarita.
Después del baile, y bajando un poco la locura, disfrutaron de varios espectáculos musicales. Con palmas y haciendo el coro, demostraron que las pilas nunca se les acaban. Más tarde, llegó el tuno de la cena. Abrieron las canastas y compartieron sanguchitos, pizas y tartas. ‘Tuvimos varias charlas con nutricionistas, pero hoy nos salimos de la dieta‘, dijo entre risas Marisa Clavero, otra de las participantes de las pistas.
También hubo un homenaje a Blanquita, una de las alumnas que falleció hace poco y que fue durante un largo tiempo la Reina del programa municipal.

