Por cuarta vez en su historia, la Parroquia de Santa Bárbara, en Pocito, está remodelándose. Esta vez, luego del peligro de derrumbe, levantaron el techo y ayer empezaron a colocar uno nuevo. Pero como la obra es compleja y demorosa, los fieles ahora asisten a misa en el patio de la escuela parroquial, en el que los domingos improvisan un altar y colocan los mismos bancos de la tradicional parroquia.

El templo sin el techo impacta desde el ingreso, con la imagen central de Santa Bárbara dominando un espacio que parece haber sufrido una catástrofe. No hay bancos, algunas imágenes de los santos están tapadas y otras guardadas en la sacristía. No fue fácil lograr demoler el techo y para juntar los fondos, poco más de 600.000 pesos, la comunidad colaboró con rifas, peñas y donativos, mientras que buena parte del dinero provino de subsidios del Gobierno provincial y de la Municipalidad de Pocito.

Los trabajos empezaron en diciembre y durante todo el tiempo que pasó y el que aún queda de obra, el espacio entre las aulas de la Primaria del Colegio Santa Bárbara, también frente a la plaza departamental, es el escenario de las misas dominicales (durante los días de semana, las celebraciones deben llevarse a cabo en la capilla de las Hermanas Salesianas, por Calle 11). Los bancos del templo, guardados en un depósito, entonces son colocados en el predio, a la vez que las confesiones se toman en un rincón, aprovechando las sillas de los alumnos. En tanto que para Semana Santa, la adoración eucarística se llevará a cabo en una de las aulas, adelantaron.

VIEJO PROBLEMA

El problema del techo es que la humedad lo había afectado y por eso sufría desprendimientos de la loseta, cuyos restos no caían sobre la gente pues había una rejilla de madera.

Para evitar futuros problemas, el nuevo techo será liviano, de chapa y lana de vidrio, mientras que las maderas del viejo sobretecho serán colocadas nuevamente aunque en una disposición distinta a la original. La idea es que la nave del templo se vea más alta e imponente.

‘Ahora empezaron a poner las chapas que reemplazarán a la loseta, pero aunque se estima que será algo rápido, puede estar terminado recién a fines de abril. El otro inconveniente es que durante la rotura del techo, los escombros dañaron el altar y por eso será reemplazado, así que seguramente pediremos otra ayuda de los fieles. En cuanto al nuevo diseño del altar, es algo que el padre Sergio Ramos esconde para poder sorprender a los fieles‘, contó Franco Cano, administrador del Colegio Parroquial.