La rivalidad entre Unión y Del Bono ha crecido notablemente en los últimos tiempos. Ayer, fue la segunda vez en menos de quince días, que ambos equipos se cruzaban en ese escenario con ambas parcialidades. En ambas ocasiones la convocatoria fue interesante.
Hace quince días atrás, chocaron por Copa Argentina. El Azul terminó ganando por penales eliminando al Bodeguero del torneo nacional. El encuentro de esa noche terminó sin incidentes tras un gran operativo policial.
Ayer, otra vez chocaron con ambos públicos. Las tribunas colmadas, el color y el duelo de cánticos entre las hinchadas le dieron al encuentro, el marco necesario para que el juego sea un verdadero clásico.
En el final, fueron los locales los que terminaron festejando. Mientras que los visitantes, a pesar de la derrota, se retiraron sin reproches demostrando una vez más, que es posible jugar los clásicos sin que reine la violencia.
