La UTA difundió este miércoles un comunicado informando que los colectiveros se encuentran en estado de alerta tras la suspensión de una reunión que tenía prevista con ATAP y la Secretaría de Transporte.  Según explicaron, los trabajadores son obligados a manejar a alta velocidad para cumplir con las frecuencias poniendo en riesgo a los pasajeros.

Con el objetivo de llevar esta problemática al sector empresario y el organismo de control se solicitó una reunión que  finalmente no se concretó y desató  el ultimátum del gremio. “Si hasta el martes 5 de noviembre no tenemos una solución definitiva a lo planteado, el miércoles se comenzará con asambleas informativas y resolutivas en todas las empresas desde las 4.30 de la mañana  con la intención de definir las medidas a seguir”, concluye el comunicado.