El vicepresidente, Julio Cobos, vuelve a Buenos Aires con el visto bueno del Confe para sellar la integración en la Convención Nacional radical. Pero el sábado por la noche no había conseguido aún imponer la paz entre sus propias filas mendocinas, encarnizadas en un enfrentamiento por los cargos de las listas para el 28 de junio.

El vicepresidente había llegado el sábado a Mendoza pero no apareció por el congreso que su partido, Consenso Federal (Confe), realizó en un salón de Guaymallén para ratificar el acuerdo con la UCR para las elecciones de junio. Las listas “nacionales” parecen próximas al acuerdo, porque el actual senador Ernesto Sanz y la ex ministra de Cobos, Laura Montero, serían los candidatos “integrados” a las senadurías nacionales por Mendoza.

El problema sigue siendo fundamentalmente las diputaciones nacionales y -sobre todo- las listas de legisladores provinciales, que no consiguen acuerdos mínimos. La Unión Cívica Radical (UCR) y el Confe procuran en Mendoza acordar listas comunes para evitar ir a una interna desgastante.

Es que las aguas están muy agitadas entre los sectores internos del Confe, sobre todo entre los que lideran uno de los laderos de Cobos -Alfredo Cornejo, actual intendente de Godoy Cruz- y el ex gobernador Juan Carlos Jaliff.

No están calmas en la enorme mezcla de radicales y cobistas que por estas horas buscan acordar los espacios y las candidaturas para la Legislatura y los concejos deliberantes. Por eso el vicepresidente decidió no asistir el sábado al cónclave de su fuerza, para no tener que intervenir públicamente en la puja. El plazo para presentar listas vence a la medianoche de hoy.

Precisamente en esta, su tierra política base, no le es propicio un acuerdo a Cobos, un cultor de estos pactos. Cobistas y radicales se pasan minuto a minuto de un lado a otro.

El sábado por la noche eran evidentes los cruces entre los más allegados a Cobos y el eje integrado por los seguidores del ex vicegobernador Juan Carlos Jaliff y los intendentes “territoriales” de la zona Este: Mario Abed (Junín), Gustavo Pinto (La Paz) y Gerardo del Río (Rivadavia), que encuentran en los ex caciques Ricardo Mansur y Sergio Pinto sus máximos referentes.

Hay terceros en discordia, en esta puja entre radicales y cobistas. Es que los terceros en discordia son los acólitos del ex gobernador Roberto Iglesias y el intendente de la Capital, Víctor Fayad, la histórica línea del radicalismo llamada Convergencia, que ahora negocia con Jaliff y los suyos una alianza de último momento.