Algunos de los afectados no recordaban tanta furia de la lluvia y el viento. El intendente de Caucete, Juan Elizondo, se animó a decir que fue un diluvio. El temporal que azotó a la provincia anteanoche fue particularmente virulento en Caucete, el departamento más afectado por el fenómeno ya que golpeó con intensidad a cuatro asentamientos y un barrio, por lo que tuvieron que evacuar a 52 personas, además de que durante varias horas hubo falta de servicios, como luz y agua, y el viento derribó unos 200 árboles. La lluvia también obligó a sacar de sus viviendas a unas 60 personas en 9 de Julio y a unas 20 en Iglesia, por lo que al cierre de esta edición la cantidad de evacuados superaba los 130 en la provincia.
En Caucete, los asentamientos Belgrano, Las Moritas, Calle Corrientes y Calle Caseros fueron los más perjudicados, con viviendas inundadas y algunas hasta con caídas de paredes, como la que sufrió Gerardo Jorquera, a quien se le derrumbó parte de la cocina y de una pieza. ‘Por su suerte la pared se cayó para afuera, pero me arruinó un aparador y se mojaron todos los muebles’, contó el hombre, mientras arreglaba su vivienda del asentamiento Belgrano.
En Las Moritas, Silvana acarreaba tierra con una carretilla que le prestaron, para poner dentro de su ranchito, lleno de barro. ‘Perdí colchones, la ropa de las niñas y mercadería. A las 3 de la mañana me tuve a que ir a lo de mi hermana porque tenía miedo que se me cayera todo’, contó.
El quinto vecindario afectado fue el barrio Guayama, ya que se desbordó el desagüe que corre paralelo al lugar e inundó buena parte de las más de 100 viviendas, con vecinos que nada pudieron hacer ante el avance del agua. Algunos indicaron que en las casas más bajas, el líquido alcanzó más de 30 cm de altura.
Todos los evacuados fueron trasladados a la sede de la Federación de Uniones Vecinales, a la Bodega El Parque y a la Unión Vecinal de Villa Las Rosas, informó el intendente Elizondo. Por otro lado, para desagotar el agua estancada en casas y calles, la Municipalidad de Caucete pidió colaboración de camiones con tanques atmosféricos a Sarmiento, San Martín, 9 de Julio y 25 de Mayo.
Además, durante la noche del 25 y parte de la jornada de ayer, faltó el servicio de luz y agua, que fue restableciéndose con el paso de las horas. Es más, en medio del temporal quedaron fuera de servicio cinco perforaciones de agua, pero en la siesta de ayer ya habían sido recuperadas y por consiguiente volvió el agua potable.
En 9 de Julio, por su parte, el lugar más afectado por la lluvia fue el Loteo Municipal, en Las Chacritas. Según el intendente Walberto Allende, anteanoche tuvieron que evacuar a 60 personas (que en la mañana de ayer volvieron a sus casas) y de acuerdo a un relevamiento, más de 50 ranchos quedaron seriamente dañados, con caídas de paredes y techos y dos personas heridas. Allí, hasta las calles quedaron inundadas y algunas máquinas viales que enviaron para liberar el agua quedaron enterradas.
En Iglesia, en un asentamiento de Rodeo tuvieron que evacuar al menos a unas 20 personas porque sus casas quedaron inundadas, informó Daniel Tripolone, titular de Emergencia Social del Ministerio de Desarrollo Humano. En ese departamento el temporal fue particularmente intenso, con anegamiento de calles, cortes de luz, crecidas de arroyos e ingreso de agua a viviendas en distintas localidades.
En Pocito, unas 10 familias del asentamiento David Chávez y unas 5 del Lote Hogar 33-Espacio Verde vieron cómo sus casas se llenaron de agua, aunque no fueron evacuadas.
Por su parte, por las crecientes, las rutas 40 (entre Adán Quiroga y Tucunuco) y 150 (hacia el límite con Chile) estuvieron cortadas durante algunas horas, pero luego fueron liberadas.
De todos modos, no fue el temporal más dañino. Aún está latente la inundación en Media Agua, en febrero pasado, que dejó más de 400 evacuados, y la tormenta trágica de enero de 2012, con 160 viviendas afectadas en 25 de Mayo, Caucete y Rawson y un fallecido.

