El 26 de abril de 2011, el juez correccional Eduardo Gil condenó a Gustavo Cortez (26) a 3 años y 8 meses de prisión, con cumplimiento efectivo, por atropellar y matar con su auto a Celeste Archerito el 26 de agosto del 2009. El fallo sentó precedente por ser el único caso en que, por una muerte en accidente, el acusado fue preso. Cortez libró una batalla legal para evitar ir a la cárcel, pero el 14 de mayo pasado el fallo quedó firme y fue a prisión.