En mi carácter de Director del Departamento de Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de San Juan, efectúo mi opinión respecto a una nota enviada por el "Foro de Periodismo Argentino" ("Fopea") al señor Gobernador de la Provincia, en relación con el Concurso del Día del Periodista. Al respecto, dese expresar lo siguiente:
1. Con respecto a la expresión "que no sometan a los profesionales ante la disgustante situación de concursar por un premio monetario", considero que la participación es absolutamente voluntaria y en ningún modo obligatoria. No participan automáticamente la totalidad de trabajos periodísticos publicados desde tal fecha hasta tal otra.
2. Desde mi óptica, no debe entenderse este concurso como un paliativo de magros sueldos de periodistas, sino como un estímulo o incentivo a la actividad. La discusión salarial se dirime en otros ámbitos (sindicato, paritarias, etc.) y es motivo de otro debate.
3. Se da al término "Estado" la acepción de "gobierno" y aparentemente también la de "oficialismo". No es el gobierno el que decide quién gana el premio, sino un jurado que, ni en su totalidad ni en su mayoría, es nombrado por el gobierno de turno. Desde hace tiempo está estipulado que, si bien el jurado está compuesto por el Subsecretario de Información Pública de la Provincia o delegado de él, también está integrado por: el Director del Departamento de Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de San Juan (que es electo por su claustro) o persona que éste designe, el Secretario General del Sindicato de Trabajadores de Prensa y Comunicación Social (que es electo por sus pares) o persona que él designe, un representante electo de los fotógrafos y cameramen, un representante electo de los periodistas participantes. Si bien hay un representante del Gobierno, éste es el único designado por el Gobernador. Si al premio lo otorga el Gobierno de la Provincia, personalmente no me opongo a que uno de los jurados lo represente, más allá de su filiación partidista.
4. No es que el jurado proponga un dictamen que pueda ser modificado o rechazado por el Gobierno. El dictamen es absolutamente vinculante para el Gobierno y desde que se ha instituido este premio, que yo sepa, el Gobernador de turno (sea quien fuere) ha emitido de inmediato un decreto ratificando a rajatabla ese dictamen.
5. Los conceptos de "respeto de principios éticos" y "calidad profesional" que el Presidente de FOPEA enuncia como bases de la institución a su cargo, también son materia de opinión, al igual que las cualidades de "relevancia", "fidelidad" y "claridad en los objetivos", que se valoran para otorgar el mencionado premio, de ahí la necesidad de un jurado. En profesiones sociales o humanísticas como el periodismo, todos sabemos que, al no tratarse de ciencias exactas, sus indicadores, de existir, son lábiles.
6. En conversaciones informales que en distintas oportunidades he mantenido con comunicólogos o periodistas de otras provincias, éstos han estimado conveniente implementar un concurso similar en aquéllas.
7. En concursos de años anteriores, he escuchado a periodistas quejarse porque, según ellos, los premios no reflejaban, en su monto, el porcentaje de publicidad oficial que la ley establecía. También se quejaban algunos por el hecho de que se hubieran entregado demasiados premios compartidos y de que esto hacía que los montos efectivos percibidos por los ganadores reales fuesen menores. Las críticas que he escuchado más bien tienen que ver con el hecho de proponer perfeccionar su mecanismo de selección que con cuestionar el otorgamiento mismo. Con esto quiero manifestar que, desde mi óptica, en los periodistas locales, en general, ha habido y hay aceptación al otorgamiento de este premio.
8. Por lo anteriormente expuesto, desde mi punto de vista, no "se ven afectados principios republicanos elementales", como afirma la nota de FOPEA. La integración misma del jurado da cuenta de esto.
Sin otro particular, lo saludo atentamente.
Mg. Guillermo COLLADO M.