Un llamado vecinal alertó a Bomberos por las llamas y el humo que salían de un contenedor de basura, pasadas las 7.30. Minutos después, los efectivos apagaron el fuego, pero el contenedor ubicado en calle Mitre al 400 quedó dañado y fuera de servicio. Es el segundo depósito de basura del sistema Easy que incendian en menos de 10 meses y en la Municipalidad de la Capital afirmaron que no descartan nada, por lo que sospechan desde un acto vandálico aislado hasta un hecho con un claro trasfondo político.
El contenedor estaba en Mitre entre Alem y Catamarca, frente al Colegio Notarial. Alguien prendió fuego a la basura en su interior pasadas las 7 y al rato, el fuego asomaba por las compuertas plásticas. “Yo entré a trabajar antes de las 8 y los Bomberos ya lo estaban apagado. Estuvieron un rato, parece que querían asegurarse que no quedara nada prendido adentro”, dijo la empleada de una casa ubicada a pocos metros del contenedor.

Si bien el recipiente tiene una estructura de aleación metálica que lo vuelve resistente al calor, algunas piezas son de plástico, como las tapas, por lo que el fuego deformó el sistema de cierre (pese a accionar la palanca con el pie, la tapa no se abría) y el contenedor quedó fuera de servicio.

Por eso, con el transcurso de las horas y ya con el depósito dañado y con agua en su interior, algunos vecinos metieron como pudieron algunas bolsas, mientras que alrededor del contenedor se juntaron varias cajas de cartón y otros desechos.

“Hicimos un sumario administrativo para investigar el incendio, a la vez realizamos la denuncia policial. Si bien tenemos poca información, sabemos que alguien arrojó un papel con fuego, por lo que fue un acto intencional. Un vecino que vio el incendio hasta echó agua con un balde, hasta que llegaron los bomberos. A diferencia del que quemaron el año pasado, el fuego de ahora fue más dañino y más grande porque arruinó las dos tapas”, dijo el intendente Marcelo Lima.

Sobre las causas de esto acto vandálico, Lima no descartó ninguna hipótesis. Ni la de un daño propio de un inadaptado o si el hecho podía tener una conexión con el conflicto que el municipio mantiene con el gremio SUOEM. “No tenemos pruebas para acusar a nadie, pero no descartamos nada. Por suerte los vecinos condenan estos hechos y no tengo miedo de que se generalicen”, agregó Lima.

Con este, ya son 7 los contenedores con algún tipo de daño. En julio de 2010, quemaron uno por Laprida y Entre Ríos, en diciembre una camioneta chocó un contenedor en Catamarca y Mitre (el conductor se fugó) y en septiembre aparecieron cuatro pintados con graffitis.