Los candidatos presidenciales Daniel Scioli (Frente para la Victoria), Mauricio Macri (Cambiemos) y Sergio Massa (UNA) rechazaron ayer, con matices, la represión en Tucumán contra las protestas por las irregularidades registradas en las elecciones provinciales del domingo. Scioli repudió la “represión” y “la actitud autoritaria de algunos miembros de la Policía” contra la movilización y acusó a Macri de “arengar” para que se produjera la “violencia”. “En democracia se gana o se pierde, y cuando se pierde no se puede llevar adelante este tipo de acciones que han incentivado estos niveles de agresión de un lado y otro”, dijo y envió un mensaje al referente de PRO: “A mí no me va a venir a correr”. Por su parte, Macri le reclamó a Scioli, al gobernador José Alperovich y a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner que “garanticen que vuelva la paz”, tras lo cual afirmó que la movilización en la Plaza Independencia de San Miguel de Tucumán fue “espontánea”, porque se trata de “un fenómeno que pasa en el mundo de ciudadanos que quieren que se haga un recuento como corresponde”. En tanto, Massa repudió la represión al afirmar que le duele “tremendamente que Argentina termine cada 10 años con episodios tremendos por la disputa de poder”. “Hagamos el esfuerzo para que el 25 de octubre en Argentina el presidente se vote por voto electrónico. Tomemos el ejemplo de Salta o la Ciudad. Ambos dieron muy buenos resultados de rapidez y transparencia”, agregó.
