El rock nacional a todo volumen sólo animó en parte a los chicos que ayer fueron al Del Bono Beach. El locutor-animador varias veces tuvo que invitar a los chicos a acercarse al escenario y a bailar. Sólo unos pocos se engancharon en esta propuesta, sobre todo cuando comenzaron a tocar las primeras bandas locales. El resto prefirió quedarse bajo los quinchos o pegarse un chapuzón tanto en el lago como en las piletas del complejo.
