Luego de la masiva clausura de boliches que sucedió durante la madrugada de Navidad, desde CADISA (Cámara de bolicheros) salieron a reclamar que sean escuchados y que se modifique, principalmente, la ley que los regula ya que es del 2001 y la consideran obsoleta. En este sentido, el presidente de CADISA, Juan Manuel Salvalaggio, confirmó que hubo un acercamiento con autoridades provinciales.
Contó que tuvo una comunicación con el vicegobernador Fabián Martín y este jueves, mantendrá una reunión con el secretario de Seguridad, Gustavo Sánchez. "Lo que para nosotros ya es un montón porque hablamos de que se abrieron a escucharnos porque antes jamás pasó", sentenció.
Consultados sobre las modificaciones, uno de los puntos que desean que cambie es el horario de cierre. "La ley es antigua y por ejemplo, un artículo expresa textualmente que ‘personas anormales, no pueden ingresar’ para que se den cuenta cómo se refiere a algunas personas", destacó.
Posteriormente, sostuvo que seguramente las críticas provendrán de los mayores de 50 años "porque la gente está en otra". "Nosotros tratamos de dejar conformes a los vecinos y a los chicos que vienen a los boliches", aseguró y agregó que tampoco coincide el horario del transporte público justificando que no todos los jóvenes tienen para pagar un taxi: "Yo tengo un boliche en Pocito y hay muchos que vienen de Chimbas".
Salvalaggio dijo que en Mendoza, por ley, los cortes se dan a las 7.30 entendiendo los horarios del sector y apuntó a que si a los chicos "le cerrás un boliche legal, se van a buscar uno clandestino; no se van a dormir". "No hay nada más lindo que ver el amanecer al salir de bailar cuando uno es joven", resaltó.
Finalmente, aseguró que "tengo mucha fe de que va a haber un cambio y que nos escuchen". "Nos canasamos que nos traten como a unos delincuentes, somos todo lo contrario, damos diversión a los pibes, ellos están contenidos. Queremos que dejen de crimilanizar al sector", cerró.

