A una semana de que ganara estado público, los tres detenidos por el caso de la bebé entregada de forma irregular recuperaron ayer la libertad: la mamá de la criatura y los hermanos Carolina y Javier Castro. Los tres fueron excarcelados pero siguen ligados a una causa judicial por supresión de estado civil y falsificación de documento público, ya que asentaron a la bebé con otro apellido. La madre dijo que aprovechó para reencontrarse con sus cuatro hijos, que se encuentran bajo el cuidado de dos tíos, incluso la bebé, que ayer dejó de estar en un hogar dependiente de Desarrollo Humano.
“Estoy contenta porque vi a mis hijos. Todos estos días en que estuve detenida, lo único que hice era pensar en ellos. Lo que pasó fue un malentendido, jamas quise vender a mi bebé”, le dijo Y.C. (se reserva el nombre para resguardar a los menores) a DIARIO DE CUYO apenas fue liberada ayer al mediodía.
“Yo a Carolina la conocía, era mi amiga y hasta viví un tiempo con ella en la casa de sus padres. Después me sentí incómoda y me vine a lo de un hermano; ahí nos dejamos de ver, pero nos seguimos mandando mensajes. Al tiempo yo me quedé embarazada y cuando se acercó la fecha del parto, le mandé un mensaje a Carolina, porque yo sabía que no puede ser madre. Le dije que yo no tenía ni para los pañales y que si podía tener a mi hija. Ella me dijo que sí y ese día me vio tan mal que me dio plata para ayudarme con mi otra hija. No fue que vendí a mi bebé”, dijo.
“Después que se la di, me arrepentí. Me sentía mal, me dolía, me sentí mala madre. Le mandaba mensajes todo el día, preguntando cómo estaba mi bebé, le decía que yo estaba mal. Después pasó lo que todos saben”, dijo la mujer, de 25 años.
Es que luego, Y. C. realizó una denuncia policial y entonces la Policía detuvo a la mamá, a Carolina y a su hermano Javier, quien se hizo pasar por el padre de la bebé y la asentó en el Registro Civil como si fuera hija suya. El abogado de los hermanos Castro, Juan Manuel Riveros, no descartó que pidan una ampliación de indagatoria pues pretenden explicar paso a paso cómo ocurrieron los hechos en los que no tuvieron intención de perjudicar a la bebé. “Tanto Carolina como Javier se encuentran bien y están dispuestos a aclarar todo. A la excarcelación la vivieron con mucha intensidad, entre lágrimas. Jamás pensaron que pasarían algo así”, dijo.
CON UNA TÍA:
La Dirección de la Niñez resolvió ayer que la bebé empiece a ser cuidada por una hermana de la mamá, tal como había anticipado DIARIO DE CUYO. Un rato antes de que liberaran a Y. C., las autoridades de esa dirección llevaron la criatura a la casa de su tía, incluso con su cunita.
“Fue un momento de mucha emoción. Yo a mi sobrina no la conocía y cuando la vi sentí esa cosa hermosa de ver a un bebé por primera vez. Lo que me dijeron es que me tengo que hacer cargo hasta que se resuelva la situación de mi hermana. Lo importante es que la bebé ya está con la familia”, afirmó.
A su vez, la hija mayor de Y. C., de 5 años, desde la semana pasada que se encuentra bajo el cuidado de otro tío, quien además ya tenía a los otros pequeños de la mujer, de 2 y 3 años. La nena también estaba en un hogar del Estado. En tanto, Y. C. va a quedarse a vivir en la casa de este último hermano. Eso no significa que por ahora se haga cargo de sus hijos, pues así lo resolvieron las autoridades.
