Estuvo liderando la carrera en soledad, durante casi 35 kilómetros, durante el transcurso de la segunda vuelta y el inicio de la tercera. El chileno José Luis Balague, que corre para uno de los equipos más chicos, el Participal Orbai, consiguió ayer ser el imán de todos los relatores radiales y de todas las cámaras, sean fotográficas o de video. Se dio el lujo de ganar la última meta bonificada, regando con su esfuerzo las calles de San Martín.
