Antes del caliente final, el malhumor de los jugadores de San Martín fue en aumento por fallos del árbitro que les hizo sentirse perjudicados.
Uno de los más importantes fue en la jugada del gol del partido, ya que López, el delantero de Quilmes que envió el centro para que convirtiera su compañero Lentini, estaba volviendo de una posición adelantada cuando recibió el pase.
Además, Sabino no cobró una clara infracción en el complemento en la puerta del área que le cometieron a Sparapani y que incluso se podría haber considerado como último recurso para el infractor. Para colmo, los jugadores del Verdinegro hasta creyeron que era penal. Sorprendió a Enrique Hrabina que él haya sido el primero al que enviaron a la ducha, cuando reclamó un lateral apenas transcurridos los primeros minutos del encuentro.
Estas decisiones y otras como considerar que no midió con la misma vara Sabino al momento de amonestar, puso mal el ánimo de los jugadores. En al fecha anterior, ganaron gracias a un incorrecto penal que sancionó Baliño en el triunfo ante Aldosivi. Baliño no fue designado para dirigir en esta fecha. ¿Lo hará Sabino en la próxima?
