Lejos de calmarse las aguas en Angaco el día después de las declaraciones polémicas del intendente Víctor Fernández, los ánimos continuaron caldeados. Sobre todo en el ámbito del Concejo Deliberante del departamento. Ayer por la mañana hubo sesión y fuentes allegadas al Concejo afirmaron que hasta se propuso la idea de salir a aclarar la situación ante los medios porque con los dichos de Fernández habían quedado “mal pegados”. Sin embargo esto no se dio.
Lo que sí salió a la luz es que el tema del modo de entrega de viviendas en Angaco viene siendo cuestionado desde hace al menos dos años, por parte del concejal José Castro, del Bloque Lealtad y Compromiso Justicialista. Desde el 2008 hasta marzo de este año, el funcionario presentó notas al intendente, al presidente del Concejo Deliberante de Angaco, al titular del IPV y al mismo gobernador Gioja, pidiendo que cambiaran el sistema de entrega de viviendas y que pusieran en práctica la modalidad de sorteo. Según el concejal, hasta el momento no tuvo respuestas a sus peticiones.
Por su parte, Omar Blanco, el diputado departamental, admitió que maneja un cupo en el reparto de casas y dijo desconocer por completo si los funcionarios le dan casas a sus familiares. Cuando este diario le comentó que la concejal Alaniz le entregó una casa a su hija, dijo: “Lo que haga cada concejal con las casas es problema de cada uno”.
