Ayer, antes del ingreso de los alumnos, las autoridades de la Escuela Rogelio Boero recibieron un llamado telefónico. Una persona les anunciaba la presencia de una bomba en el establecimiento. Inmediatamente llamaron a los Bomberos para que pusieran en práctica el operativo correspondiente y revisaran cada rincón. Ellos demoraron casi 2 horas desarrollando la tarea, porque el edificio es muy grande. Por eso, los alumnos regresaron a sus casas. Así, todo el turno mañana se quedó sin clases y las tareas se reanudaron durante la tarde.