A Natalia Fernández se le nota en el tono de su voz el entusiasmo que vive por la receta que acaba de crear. Pero no es sólo por su logro personal, también puede servir para promocionar a un fruto que es característico de su pueblo natal, Astica. Además, afirmó que su ‘invento’, unos alfajores de cidra, tuvo una repercusión más fuerte de lo que esperaba entre los pocos que ya pudieron probarlo.
Natalia reside actualmente con su familia en la villa cabecera del departamento Valle Fértil. Portera en una escuela, también tiene una pequeña panadería. Y haciendo un curso es que se propuso elaborar un producto innovador. Así, fue a sus raíces, y encaró la idea de elaborar unos alfajores hechos con el dulce del cítrico que es característico de Astica. Como muchas veces debe aclarar que no se trata de la bebida hecha a base de manzana, que comienza con la letra ‘s’, es que interpreta que fuera del departamento no hay mucho conocimiento del fruto.
Su receta es otro intento de un astiqueño en demostrar las bondandes de la cidra. Además que ya se eleabora el dulce, hubo otros proyectos como el helado de este cítrico. Luego de meses de experimentar, en los que por ejemplo decidió que el glaseado iba mejor que el baño de chocolate, y de consultar a distntos reposteros, a principio de este diciembre llegó a la receta que considera indicada. Sorprendida por las primeras repercusiones, tendrá un envión anímico para comenzar a desplegar toda la tarea para poder elaborar a otra escala y comercializarlos. Agregó que ya una emprendedora mendocina le pidió que la contacte cuando comience la producción sostenida, para llevarlos a su porovincia.
Así, su sueño es que todo turista que vaya a Valle Fértil, pruebe los alfajores y se lleve otro de recuerdo para regalar a conocidos. Así estará promocionando a su querido Astica, a través de un fruto característico.