Roberval tuvo relaciones conflictivas con algunos de sus compañeros y técnicos que lo dirigieron, pero con el hincha de San Martín siempre gozó de un apoyo casi incondicional. Desde su arribo el público lo tomó como uno de sus mimados y el clásico ‘olé, olé, olé, negro, negro’ sonó decenas de veces en el Hilario Sánchez. Junto con el arquero, Luciano Pocrnjic, y el goleador, Sebastián Penco, resultan sin dudas los tres elegidos por la gente del plantel actual. “La gente conmigo se portó siempre de diez. Me alentó siempre durante el tiempo que estuve quebrado y cuando volví me demostraron todo su afecto. Yo me maté siempre por esta camiseta y al que me pregunta de San Martín le digo que lo de la gente es algo tremendo. Voy a estarles siempre muy agradecido”, destacó el delantero.