La fila de autos parecía interminable, pero la alegría de la gente hizo que muchos no tomaran noción del tiempo que esperaron para llegar al ingreso del Autódromo El Zonda Eduardo Copello. Sin embargo, hubo otros que dijeron que hicieron una fila de al menos media hora para lograr pasar la puerta de entrada. Así fue el ingreso ayer para ver el espectáculo de cierre de la Fiesta Nacional del Sol.

La espera fue tranquila. Tomaron mate, compartieron pastafrola, bizcochuelos y hasta sanguchitos de milanesa. ’Lo más duro del ingreso es aguantar a los niños que se aburren por estar encerrados en el auto’, dijo Martín Ocampo, de Chimbas. Pero aclaró que todos los años aguantan todo por ver el show. Al igual que él hubo mucha gente que dijo que la espera vale la pena.

Desde la Policía de San Juan, contaron que en el operativo de tránsito hubo unos 80 efectivos afectados. Ellos se encargaron de distribuir los vehículos y de ordenarlos para que el tránsito fuera lo más ágil posible. Iván Fonseca, a cargo del operativo, dijo que la hora en la que más gente ingresó fue cerca de las 18. A la vez, dijo que por consiguiente fue la hora en que la gente más esperó. En ese momento, la fila de vehículos llegó hasta la cementera que está cerca del Jardín de los Poetas. ’Estuvo más ágil que el año pasado’ dijo el efectivo de la Policía y explicó que en ningún momento la cola pasó esta fábrica, siendo que el año pasado en varias ocasiones ocurrió eso.

En contraposición hubo gente que llegó cerca de las 16 y dijo que no esperó más de 5 minutos para ingresar al Autódromo.